ALTA INTENSIDAD CARDIOVASCULAR Y SALUD: PROS Y CONTRAS
En los últimos años se ha extendido la idea de
que el entre-
namiento de alta intensidad cardiovascular es el que más ben-
eficios reporta para la salud, no obstante algunos autores han
advertido del riesgo que conlleva en algunos casos.
namiento de alta intensidad cardiovascular es el que más ben-
eficios reporta para la salud, no obstante algunos autores han
advertido del riesgo que conlleva en algunos casos.
Debido
a esto consideramos de vital importancia conocer las últimas investigaciones
publicadas
para así tener una base científica en la que apoyar nuestras ideas referentes
al entrenamiento de alta
intensidad.
intensidad.
A continuación
revisamos algunas publicaciones muy interesantes que han estudiado las ventajas
y desventajas de realizar entrenamientos de elevada intensidad en diferentes
grupos de población
A FAVOR:
A FAVOR:
El Colegio Americano de Medicina del
Deporte (ACSM) y l asociación Americana del Corazón (AHA) recomiendan, con el objetivo de mantener un
estado óptimo de salud, que todos los sujetos sanos con una edad comprendida
entre los 18 y los 65 años realicen ejercicio cardiovascular de intensidad
moderada durante un mínimo de 30 minutos y con una frecuencia de 5 días a la
semana; o ejercicio cardiovascular de intensidad vigorosa, durante al menos 20
minutos, y con una frecuencia de tres días por semana (Tabla i). En la misma
recomendación Haskell y col., 2007 añaden la posibilidad de combinar ejercicio
de intensidad moderada con ejercicio de intensidad vigorosa en diferentes días
de la semana, siendo caminar rápido un ejercicio de moderada intensidad y
correr suave un ejercicio de intensidad vigorosa.
TIPO DE EJERCICIO FRECUENCIA INTENSIDAD TIEMPO
|
|||
Cardiovascular
|
5 días
|
Moderada
64-76% FCmáx o 40-59% FCR |
30
minutos |
Cardiovascular
|
3 dÍas
|
Vigorosa
77-95% A FCmáx o 60-89% FCR |
20
minutos
|
Posteriormente, el propio ACSM publicó en
la "Guía para la prescripción del ejercicio" las mismas recomendaciones mostradas en la tabla
I , añadiendo que el ejercicio moderado es aquel comprendido entre 64-70% FCmáx o 40-59% FCR, mientras que el
vigoroso sería entre 77-95% FCmáx o 6o-89% FCR. En esta misma publicación
Garber y col., 2011 afirman que realizar
ejercicio de intensidad vigorosa tiene más beneficios que realizar ejercicio de
intensidad
moderada para la salud de sujetos adultos sanos, y se asocia con mayores reducciones de los factores de riesgo cardiovascular y otras causas de muerte, en comparación al ejercicio de intensidad moderada.
moderada para la salud de sujetos adultos sanos, y se asocia con mayores reducciones de los factores de riesgo cardiovascular y otras causas de muerte, en comparación al ejercicio de intensidad moderada.
En la misma línea. Helguerud y col., 2006 observaron
mayores incrementos del VO.máx y del
volumen sistólico en los sujetos sanos que realizaron entrenamiento interválico de alta intensidad en
comparación a los que entrenaron a intensidades más bajas.
volumen sistólico en los sujetos sanos que realizaron entrenamiento interválico de alta intensidad en
comparación a los que entrenaron a intensidades más bajas.
En el caso de sujetos con problemas cardiovasculares
también se han encontrado beneficios asociados al entrenamiento a intensidad vigorosa.
Wsloff y col.. 2007 observaron mayores adaptaciones en eVO2 , remodelación del
ventrículo izquierdo, fracción de eyección del ventrículo izquierdo, riego sanguíneo
en la arteria braquial y función mitocondrial en el músculo vasto lateral
asociadas a la práctica de ejercicio a intensidad vigorosa (95%FCpico) en
comparación al
ejercicio moderado (70%FCpico), en un grupo formado por sujetos mayores postinfartados. En otro
interesante estudio llevado a cabo con 89 sujetos postinfartados, Moholdt y col., 2012 observaron
un mayor incremento del VO2 tras 12 semanas de entrenamiento en los sujetos que entrenaron mediante intervalos de elevada intensidad (4 intervalos de 4 minutos entre el 85-95%FCpico)
con respecto al grupo que entrenó a intesidad moderada (60 min. De ejercicios aeróbicos al ritmo de la música). En ambos grupos se produjeron mejoras cardiovasculares, pero solo en el grupo que realizó el entrenamiento interválico se observó un incremento de las lipoproteínas de alta densidad (HDL-C).
ejercicio moderado (70%FCpico), en un grupo formado por sujetos mayores postinfartados. En otro
interesante estudio llevado a cabo con 89 sujetos postinfartados, Moholdt y col., 2012 observaron
un mayor incremento del VO2 tras 12 semanas de entrenamiento en los sujetos que entrenaron mediante intervalos de elevada intensidad (4 intervalos de 4 minutos entre el 85-95%FCpico)
con respecto al grupo que entrenó a intesidad moderada (60 min. De ejercicios aeróbicos al ritmo de la música). En ambos grupos se produjeron mejoras cardiovasculares, pero solo en el grupo que realizó el entrenamiento interválico se observó un incremento de las lipoproteínas de alta densidad (HDL-C).
En el caso de sujetos con diabetes, también se han
observado mayores beneficios asociados al entrenamiento de alta intensidad. Di
Pietro y col-,2005 observaron un aumento
de la sensibilidad a la insulina superior en las mujeres mayores que
practicaban ejercicio a alta intensidad (80%VO2 pico) en comparación a las que
entrenaron a intensidad más baja (65%VO2 pico). También se han encontrado mayores beneficios en el
entrenamiento de alta intensidad relacionado con el síndrome metabólico, Tjonna y col.2008(8) observaron
mayores adaptaciones en la función endotelial, en la actividad de la insulina,
en la biogénesis del músculo esquelético, incremento de la lipogénesis y
menores niveles de glucosa en sangre en aquellos sujetos que realizaron
ejercicio interválico de elevada intensidad (90%FCmáx) en comparación a lo que
realizaron ejercicio continuo de moderada intensidad 70%FCmáx).
EN CONTRA:
A
pesar de los estudios citados con anterioridad, existe una importante
controversia, ya que puede resultar peligrosa para la salud de los
participantes. Algunos autores han mostrado su preocupación respecto a las
elevadas intensidades observadas durante la practica del ciclo indoor .
En
un importante trabajo de revisión de Thompson y Col 2007 analizaron las
consecuencias para el sistema cardiovascular que puede tener el entrenamiento a
intensidad vigorosa. Afirmaron que la actividad física practicada de manera
regular, con el objetivo de mantener una buena condición física general, puede
ayudar a reducir la aparición de eventos cardiovasculares como un infarto
miocardio, ya que un gran número de infartos suceden cuando el sujeto hace un
esfuerzo al que no está acostumbrado. Además recalcan las consecuencias
negativas para el sistema cardiovascular que el ejercicio de elevada intensidad
puede provocar en sujetos jóvenes con
patología cardiaca oculta.
En
el caso de sujetos adultos sanos afirman
que el ejercicio de alta intensidad conlleva un mayor riesgo de infarto
durante la práctica en sujetos sedentarios no acostumbrados a este tipo de
entrenamiento, y disminuye a medida que
el sujeto se acostumbra a la actividad. Recomiendan la práctica de ejercicio
moderado para mantenerse en buena condición física y ser prudentes a la hora de
elegir el programa de entrenamiento.
CONCLUSIONES:
El ejercicio cardiovascular de alta intensidad
parece tener beneficios para la salud pero se debe tener en cuenta:
·
Pasar un reconocimiento médico antes de empezar con el
programa de ejercicio
·
Realizar una
etapa de acondicionamiento físico antes
de empezar con la actividad vigorosa
·
Realizar los
entrenamientos bajo la supervisión de un profesional
·
Monitorizar la FC durante el entrenamiento
Diego Torrente